La historia detrás de los raros apodos que tienen los delincuentes locales
Domingo, 22 de abril de 2012
Diario UNO San Rafael
Facundito, de chico –muy poco después de la edad en la que se usan
pañales–, tenía juegos diferentes a los demás de su edad. Era un nene
travieso. Demasiado.
Los años fueron pasando y una de las últimas “travesuras” de este chico, ahora de 15 años, fue dispararle a otro menor de edad en el barrio El Molino. Hace diez días incluso se lo involucró en dos tiroteos que hubo en un solo día. El chico es peligroso. Demasiado.
Vaya saber cuándo fue que este pequeño se ganó el apodo de Pañalín. Según fuentes policiales que suelen trabajar mucho persiguiendo a delincuentes de distinto calibre, el mote le fue puesto porque “ya de chiquito se mandaba cagada tras cagada”.
Tiene antecedentes varios que lo han llevado a estar varias veces a disposición de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia. Sin embargo, sus 15 años aún lo hacen inimputable.
Indescifrables
“Si les mirás las caras nunca coinciden con el apodo, la verdad es que entre ellos solos saben el porqué”.
La palabra de un comisario alude a algo que este diario comprobó al indagar: todos los conocen por sus apodos pero casi nadie sabe el porqué de ellos.
La “profecía” se cumplió en el caso de El Pan Casero, El Tortita, Camerún y Aspirineta. Fue un dolor de cabeza rastrear el origen de sus “alias”.
El blog Al Filo de la ley incluyó éstos y varios otros nombres a la lista de apodos raros en el mundo del hampa local.
Apodos que cuelgan
El Gilipollas fue un joven oriundo de la Isla del Río Diamante. Aunque no es una especie confirmada, se dice que su mote se lo ganó gracias a sus atributos masculinos.
Larga es la lista de apodos extraños. Aunque hay una versión, el porqué del apodo del Choco Mojado no se pudo olfatear.
De él se pudo averiguar que tiene 41 años, ha vivido siempre en El Molino pero hace tiempo que no está involucrado en delitos.
Tal vez uno de los apodos más famosos es el del Vidrio Molido, un hombre oriundo de Malargüe famoso por haberse escapado varias veces de la cárcel. Debería su alias a lo “peligroso”, aunque sus antecedentes son básicamente de robos.
Tiene ya 45 años y está otra vez preso. En el '90 y '99 se escapó del penal sanrafaelino y en el '91 de Boulogne Sur Mer. “Es rápido para fugarse”, señaló una fuente.
Tortita es otro peligroso adolescente que actualmente tiene pedido de captura.
Se fugó del hogar del padre Yáñez en Monte Comán .
Es sobrino del Camerún, que actualmente también es buscado y que no ha podido ser encontrado. “Tiene gente que lo protege allí”, contó un comisario que colaboró con los datos de varios malvivientes.
Pan Casero tiene 35 años y es padre del referido Tortita. Sus apodos “panaderos” son un misterio para las fuentes consultadas.
Así es el misterioso mapa de los apodos en el mundo del hampa sanrafaelino: tiene sus originalidades y, en algunos casos, sus explicaciones. Otros quedan librados a la imaginación.
APODOS E HISTORIAS
Pañalín. Tiene 15 años, siempre ha vivido en El Molino y estuvo en hogares de menores varias veces
Pitufo. Tiene 26 años y varios antecedentes delictuales en su haber. Es oriundo de El Molino.
Choco Mojado. De 41 años y de El Molino tuvo antecedentes varios, pero hace tiempo que no está involucrado en delitos.
Gilipollas. De la Isla del Río Diamante, el año pasado se escapó de la Colonia Penal y hace 1 mes cayó en Córdoba.
Camerún. De 30 años y de El Molino salió el año pasado de la cárcel y volvió a su barrio.
Tortita. Tiene 15 años y tiene pedido de captura luego de fugarse del hogar San Luis Gonzaga de Monte Comán.
Pan Casero. Tiene 35 años y vive en El Molino.
Geniol. Así les dicen a los hijos de una mujer que viven en el pasaje Edison, barrio Constitución.
Vidrio Molido. Tiene 45 años y es oriundo de Malargüe.
Los años fueron pasando y una de las últimas “travesuras” de este chico, ahora de 15 años, fue dispararle a otro menor de edad en el barrio El Molino. Hace diez días incluso se lo involucró en dos tiroteos que hubo en un solo día. El chico es peligroso. Demasiado.
Vaya saber cuándo fue que este pequeño se ganó el apodo de Pañalín. Según fuentes policiales que suelen trabajar mucho persiguiendo a delincuentes de distinto calibre, el mote le fue puesto porque “ya de chiquito se mandaba cagada tras cagada”.
Tiene antecedentes varios que lo han llevado a estar varias veces a disposición de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia. Sin embargo, sus 15 años aún lo hacen inimputable.
Indescifrables
“Si les mirás las caras nunca coinciden con el apodo, la verdad es que entre ellos solos saben el porqué”.
La palabra de un comisario alude a algo que este diario comprobó al indagar: todos los conocen por sus apodos pero casi nadie sabe el porqué de ellos.
La “profecía” se cumplió en el caso de El Pan Casero, El Tortita, Camerún y Aspirineta. Fue un dolor de cabeza rastrear el origen de sus “alias”.
El blog Al Filo de la ley incluyó éstos y varios otros nombres a la lista de apodos raros en el mundo del hampa local.
Apodos que cuelgan
El Gilipollas fue un joven oriundo de la Isla del Río Diamante. Aunque no es una especie confirmada, se dice que su mote se lo ganó gracias a sus atributos masculinos.
Larga es la lista de apodos extraños. Aunque hay una versión, el porqué del apodo del Choco Mojado no se pudo olfatear.
De él se pudo averiguar que tiene 41 años, ha vivido siempre en El Molino pero hace tiempo que no está involucrado en delitos.
Tal vez uno de los apodos más famosos es el del Vidrio Molido, un hombre oriundo de Malargüe famoso por haberse escapado varias veces de la cárcel. Debería su alias a lo “peligroso”, aunque sus antecedentes son básicamente de robos.
Tiene ya 45 años y está otra vez preso. En el '90 y '99 se escapó del penal sanrafaelino y en el '91 de Boulogne Sur Mer. “Es rápido para fugarse”, señaló una fuente.
Tortita es otro peligroso adolescente que actualmente tiene pedido de captura.
Se fugó del hogar del padre Yáñez en Monte Comán .
Es sobrino del Camerún, que actualmente también es buscado y que no ha podido ser encontrado. “Tiene gente que lo protege allí”, contó un comisario que colaboró con los datos de varios malvivientes.
Pan Casero tiene 35 años y es padre del referido Tortita. Sus apodos “panaderos” son un misterio para las fuentes consultadas.
Así es el misterioso mapa de los apodos en el mundo del hampa sanrafaelino: tiene sus originalidades y, en algunos casos, sus explicaciones. Otros quedan librados a la imaginación.
APODOS E HISTORIAS
Pañalín. Tiene 15 años, siempre ha vivido en El Molino y estuvo en hogares de menores varias veces
Pitufo. Tiene 26 años y varios antecedentes delictuales en su haber. Es oriundo de El Molino.
Choco Mojado. De 41 años y de El Molino tuvo antecedentes varios, pero hace tiempo que no está involucrado en delitos.
Gilipollas. De la Isla del Río Diamante, el año pasado se escapó de la Colonia Penal y hace 1 mes cayó en Córdoba.
Camerún. De 30 años y de El Molino salió el año pasado de la cárcel y volvió a su barrio.
Tortita. Tiene 15 años y tiene pedido de captura luego de fugarse del hogar San Luis Gonzaga de Monte Comán.
Pan Casero. Tiene 35 años y vive en El Molino.
Geniol. Así les dicen a los hijos de una mujer que viven en el pasaje Edison, barrio Constitución.
Vidrio Molido. Tiene 45 años y es oriundo de Malargüe.
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